Conversando en un salón de belleza


Mientras me hacía los pies en un salón de belleza escuché la conversación entre otra clienta y la estilista que la atendía. La clienta contaba que estaba muy desvelada pues había tenido que acompañar a su vecina que llevó a media noche a su hija al hospital con un dolor como una puñalada a un lado del vientre, pálida, sudando helado y casi desmayada. La operaron de urgencia de un embarazo con un nombre raro que se le rompió y casi se muere. Le tuvieron que poner un montón de sangre. Muy apesarada también contaba que la muchacha había ido en tres ocasiones en los dos últimos meses a consultar por el dolor en el vientre y las tres veces le recetaron analgésicos.
La muchacha que me hacía los pies, la misma desde hace más de cinco años, me miró asustada y me preguntó: “¿y eso qué es doctora?” Las otras dos callaron y me quedaron viendo así que tuve que entrar en la conversación.
Pregunté: ¿El nombre raro es embarazo ectópico? Sí, sí, eso, me contestó la otra clienta y “¿eso qué es?” Expliqué: En los embarazos normales el embrión se implanta en la cavidad del útero pero en el embarazo ectópico o extrauterino se implanta fuera de la cavidad uterina y empieza a crecer fuera del útero.
Ninguna de estas áreas dispone de suficiente espacio ni del tejido nutricional del que dispone el útero para que se pueda desarrollar un embarazo. Y, a medida que vaya creciendo el feto, acabará haciendo estallar al órgano que lo contiene. Esto puede provocar graves hemorragias y poner en peligro la vida de la mujer. En un embarazo ectópico no hay probabilidades de que este proceso resulte en el nacimiento de un bebé vivo.
De ahí en adelante fue un verdadero diluvio de preguntas:
¿Pero cómo sucede eso? porque la hija de mi vecina ya había tenido “un niño antes”. Y así es en efecto, usualmente se da más en mujeres que ya han tenido un embarazo que en las que lo tienen por primera vez. Aunque siempre hay que estar alertas.
“¿Y a cualquier mujer le puede dar?” Sí, a cualquiera. Hasta hace pocos años, los embarazos extrauterinos se daban en uno de cada 200. Sin embargo, en la actualidad, los casos de embarazo ectópico están aumentando hasta casi uno de cada 50, por algunas razones como: Infección genital previa, cirugías ginecológicas previas, ligadura previa de las trompas, historia de embarazo ectópico anterior, tratamientos para la fertilidad o lo que se llama la reproducción asistida, consumo de cigarrillos (20 o más por día).
“¿Cómo puedo saber si tengo un embarazo de esos?” Lo primero siempre es atender las señales del cuerpo. Ni el cuerpo ni la menstruación son locos, así que cualquier alteración de la regla hay que prestarle mucha atención. Los síntomas del embarazo ectópico se pueden presentar desde las primeras semanas de embarazo. Los más comunes son: dolores constantes en un solo lado del abdomen.
Estos dolores son más o menos agudos y se producen durante las primeras semanas del embarazo, pueden producirse aislados o acompañados de náuseas, vértigos y trastornos intestinales o urinarios. Los síntomas típicos de una hemorragia interna (palidez, presión baja, sudoración, temblores, decaimiento, fatiga) también son comunes. Cuando el órgano se rompe, el dolor abdominal es intenso y se produce una hemorragia en el abdomen. Además, la mujer muestra una palidez visible, ritmo cardíaco acelerado y presión sanguínea tan baja que no se puede medir.
“¿Y porqué no se dieron cuenta en el hospital? Porque en dos meses ella fue tres veces a consultar por ese dolor y solo le mandaron pastillas. No le hicieron ningún examen”.

Aparte de atender las señales de nuestro cuerpo, las mujeres debemos saber que tenemos derecho a una atención de calidad y a una segunda opinión. Si usted mira que el tratamiento que le dan no le resuelve su problema y cada vez se siente peor, busque una segunda opinión, hable con quien tenga que hablar hasta tener un diagnóstico preciso y un tratamiento adecuado, y si puede invierta en su salud. Una simple prueba de embarazo en sangre, seguida de un ultrasonido pélvico transvaginal. No lo considere un gasto, considérelo una inversión en su salud que le puede salvar la vida. Es fundamental un diagnóstico precoz para evitar consecuencias graves.
Doctora: “¿y de verdad se pudo morir la muchacha?” Pero por supuesto que sí. Por eso es que un embarazo ectópico debe terminarse inmediatamente que se haga el diagnóstico para evitar la muerte de la mujer. Los médicos no deben de tener ninguna duda sobre esto. Las normativas del Minsa así lo orientan.
“¿Y va a quedar estéril? porque le quitaron una trompa del útero”. En la mayoría de los casos, después de un embarazo ectópico, es posible volverse a quedar embarazada en el futuro. Todo dependerá del tratamiento recibido y del estado de las trompas de Falopio. Una mujer que ha tenido un embarazo ectópico tiene aproximadamente un 15% de probabilidades de volver a tener otro.
“¿Y siempre hay que operar?” Los tratamientos para el embarazo ectópico pueden ser de dos tipos: quirúrgicos o farmacológicos. Depende de la claridad del diagnóstico, del tamaño del embrión y de las técnicas disponibles. El objetivo de los tratamientos es interrumpir el embarazo ectópico. El tratamiento farmacológico presenta numerosas ventajas respecto a la intervención quirúrgica: actúa a tiempo y es indoloro. Sin embargo, cuando la medicación no es la mejor opción para tratar el embarazo ectópico, el tratamiento más adecuado es la cirugía.
“¿Y ahora qué es lo que tiene que hacer esa muchacha?” Recibir orientaciones sobre cuidados e higiene de la herida, sobre el pronóstico de su fecundidad dado el mayor riesgo de un embarazo ectópico futuro, consejería sobre planificación familiar y proveer método que la paciente seleccione. Visita de control a las cuatro semanas posteriores al egreso o según criterio clínico del médico tratante. Reposo: Si la operación fue por laparoscopia 7 días, y si fue por laparotomía reposo por 21 días.
Todas quedaron en silencio y pensativas. Aproveché y dije:
Nunca olvidar que si sos una mujer en edad reproductiva (10 a 45 años) con relaciones sexuales y que puede estar usando o no cualquier método anticonceptivo, el embarazo siempre es una posibilidad y por lo tanto el ectópico también. Así que ante cualquier alteración de la menstruación, sobre todo que te falte, o que comience un sangrado irregular, siempre lo primero que hay que hacer es descartar un embarazo. Un simple prueba de embarazo en sangre, seguida de un ultrasonido pélvico transvaginal.
Y para las lectoras: Si te gustó esta conversación llevate esta revista. Conversá sobre esto con tus amigas, tus vecinas, tus hijas. Esta es una conversación que te puede salvar la vida a vos y a las mujeres a las que amás.