El retroceso de un país

En Nicaragua existe una ley que prohíbe la interrupción del embarazo bajo ninguna casusa, aun cuando el embarazo representa una amenaza para la vida de la mujer, desde el 2006 esta ley provida está matando a mujeres y niñas en situaciones de riesgo a vista de todos los que están en contra de esas muertes.
El código Penal de Nicaragua impone dos años de prisión a las mujeres que irrumpan de forma voluntaria su embarazo, no importa si pone en riesgo su vida, por cáncer o si el bebé ya ha muerto en el vientre, o por causa de una violación, el cuerpo medico que practique o atienda una interrupción puede ser condenado hasta con seis años de prisión.
Nicaragua es uno de los seis países que prohíben absolutamente la interrupción del embarazo, siendo esto un retroceso para los derechos sexuales y reproductivos de las mujeres, los otros países Ciudad del Vaticano, El Salvador, Republica Dominicana y Malta.
Se ha notado que el gobierno de Nicaragua obstaculiza los fondos de entidades internacionales, la sociedad civil nicaragüense, organizaciones feministas y organismos defensores de los derechos humanos mantienen una postura lineal por la lucha de la despenalización de la interrupción del embarazo, apoyando a mujeres y niñas con embarazos de alto riesgo o por violación, pero el gobierno se ha mantenido despendido del tema.